Hoy, con la fusión de Indra y Escribano Mechanical & Engineering S.L. (EM&E) en el horizonte, y con el sector militar mostrando una creciente preocupación, el montaje empieza a derrumbarse sobre su propia retórica
Duro Felguera, entre el ERE y la asistencia: Indra gana. ¿Y la empresa?
Hay decisiones que alivian, pero no curan. Operaciones que maquillan, pero no regeneran. Y discursos que, con la bandera de lo social, acaban saboteando la posibilidad misma de tener futuro.
Indra, Duro y el Tallerón: por qué salvar la calderería pesada vale más que venderla por dos duros
Pero si se menciona El Tallerón, la histórica planta de calderería pesada del grupo asturiano, el público frunce el ceño. No es que no lo entienda: es que no se lo han contado
El algoritmo de Indra y el plan de Sánchez: más favoritismo que defensa
La estrategia de Pedro Sánchez para convertir a España en «la cuarta potencia de defensa en Europa», lejos de estar cimentada en una reconstrucción seria del tejido militar-industrial, parece querer sustentarse sobre ese mismo patrón: entregar sin competir, ejecutar sin fiscalizar y blindar sin transparencia.
Duro Felguera al borde del abismo: Barbón, Moriyón y la SEPI llegan tarde (y no inocentes)
A medida que se acerca el 11 de junio, fecha límite para que Duro Felguera evite el concurso de acreedores, sindicatos, el Ayuntamiento de Gijón y el Principado de Asturias parecen haberse despertado de una larga siesta
Sánchez, Escribano e Indra: continúa el desembarco en nombre del Estado (o del Partido)
Mientras en Moncloa se diluyen explicaciones y se fabrican cortinas de humo para capear las balas de la UCO, el Gobierno avanza a paso firme en su operación más silenciosa y eficaz: el control quirúrgico de Indra, esa joya dual del Estado que sirve tanto para contar votos como para fabricar radares militares
Duro Felguera: despiece con firma pública
El Tallerón, la emblemática planta de calderería pesada en Gijón, está a punto de cambiar de manos por apenas dos millones de euros. Lo llamativo no solo es el precio de saldo, sino el comprador: Indra, la gran tecnológica española
Escribano, Montero y el “pelotazo EM&E”: La tormenta perfecta en la Indra de Pedro Sánchez
Desde que Ángel Escribano fue colocado al frente de Indra por el Gobierno de Pedro Sánchez, la compañía semipública ha dejado de ser una firma tecnológica estratégica para convertirse en un laboratorio de poder político-financiero
Santa Bárbara, Indra y la guerra del relato
El intento de Ángel Escribano de que Indra absorba a Santa Bárbara Sistemas está en modo fracaso, pero la batalla se libra ahora alrededor de la comunicación. Iván Redondo y Carmen Pérez.
Informe Financiero, Estratégico y Político de Indra (2024–2025)
Informe Financiero, Estratégico y Político de Indra (2024–2025)
Santa Bárbara no se vende (otra vez). Una historia que merece ser contada con calma, pero sin ingenuidad
Los que hoy ven en Santa Bárbara una víctima del capitalismo olvidan que, hace no tanto, fue una víctima del abandono estatal
Carmen Pérez, Indra y el poder paralelo de Pedro Sánchez
El fichaje de Carmen Pérez como nueva directora de Comunicación de Indra no es solo un movimiento técnico dentro del engranaje empresarial del Estado.
De Coslada al Ibex: La escalada de los Escribano y el nuevo Leviatán de Pedro Sánchez
En un Parlamento en el que cada ley cuesta sudor, amenazas y sobornos encubiertos, la política real se traslada al Ibex 35.
Blindados y “blindajes” desde el poder: el ascenso de los Escribano y la batalla por Indra y Santa Bárbara
Ni la fusión con Indra es imprescindible para alcanzar los objetivos de rearme, ni la vía de EM&E es la única ruta viable. La alternativa ya se ha presentado.
Intervención silenciosa: la nacionalización empresarial que se cocina en Asturias
Nadie ha anunciado una nacionalización. No se ha publicado ningún decreto ni se ha izado bandera alguna en las azoteas de Duro Felguera. Pero si uno mira con atención lo que ocurre en la industria asturiana —con nombres como Duro, Imasa o Santa Bárbara— empieza a vislumbrar lo que en tiempos menos sutiles se habría llamado estatismo rampante. Ahora lleva traje, se disfraza de “reestructuración” y sonríe desde los despachos de Indra.
Empresas privadas o públicas, sí; «chiringuitos», no
El nuevo chiringuito de la Defensa que está en Trubia