Pero si alguien pensaba que su retirada era el final de la historia, se equivocaba: la protegida de Barbón sigue en juego, esta vez a través del tablero de su marido, Rafael Murillo Quirós. Porque aquí, cuando una ficha cae, otra ya está colocada en la casilla siguiente.
Tal vez, podríamos explicar desde un posible prisma que Bitcoin es la suma de múltiples innovaciones tecnológicas y conceptuales preexistentes, cada una […]
Si consiguiera Pedro Sánchez cuadrar el círculo de la singularidad presupuestaria catalana extendiéndola a otras 16 singularidades y, por consiguiente, que ya […]